El culo de Chanel.

 

Me vais a permitir, que por un día me salga del guión y dedique una entrada a un tema ajeno ( en principio) a la temática del blog.

Voy a hablar del festival de Eurovisión y de la polémica entorno a la representante de España este año. Ya cuándo el concurso de selección, hubo lío. Estaba muy claro que digamos esa izquierda que se ha convertido en la nueva iglesia garante de la moral, tenía una preferencia clara por otra artista y una canción que consideraban un himno feminista, pero la apuesta les salió mal y acabó ganando la selección Chanel.

A partir de ahí empieza el despropósito, incluso llevando al Congreso el tema ( será que no hay problemas de verdad) y un absoluto desprecio a la ganadora y su trabajo. Me puedo imaginar la entereza mental de esta chica, ya que ha sufrido todo tipo de críticas y desprecios y aún así en silencio y trabajando ha conseguido el mejor resultado de dicho festival para España en décadas. Obviamente a la vista del resultado, muchos detractores cambiaron de opinión en un ejercicio de hipocresía y cinismo sin igual. Pero otros siguieron en sus trece, en especial ambos extremos de la esquizofrenia. Los que añoran esa España de obispos con mando y disciplina cartelera y la neoigleisa progresista, una suerte de monjas que en todo ven pecado y un ataque a la honra de la mujer, cómo aquellas monjas de antaño que regla en mano median la falda del uniforme de las adolescentes. 

Para unos la imagen superpuesta de la bandera sobre las nalgas de Chanel es un pecado, para los otros son las propias nalgas el pecado. A mi todo esto me retrotrae a esa España más oscura del pasado. Marianne guía al pueblo francés con un pecho fiera enarbolando la tricolor, desde hace siglos. 

A mi personalmente el reguetón no me gusta, que le vamos a hacer, yo soy más de tíos con barba tocando una Telecaster y cantando de las miserias de la Américavuelvrofunda. Pero le reconozco dmuchas cosas a ese estilo musical. Nace en los barrios más pobres de Centroamérica y el Caribe, en los suburbios de San Juan de Puerto Rico o Ciudad de Panamá. Dónde la gente joven la única cosa que tiene de su propiedad, si único capital, es su cuerpo. Por lo tanto lo exhiben, lo muestran y sobre todo les sacan todos los placeres, de ahí el contenido sexual de sus letras, cuando lo único que tienes para divertirte es tu cuerpo, lo usas. Luego reconzco que tiene algo de rompedor, en unas sociedades cómo las nuestras, que solemos mirar con la superioridad moral del rico occidental a otros lugares, este estilo musical rompe con lo establecido y vuelve al primitivismo de los placeres carnales sin la censura de lo políticamente correcto. Y para terminar, rompe la hegemonía del inglés en la música, para por primera vez desde que la música es un fenómeno popular, lograr un fenómeno global en un idioma distinto al inglés, que en este caso es el español, lo cual nos debería hacer sentir orgullosos a quienes tenemos este idioma cómo propio. 

Pensar que una artista o canción mancillan la nación o la mujer, sólo cabe en la cabeza de los intolerantes a uno y otro extremo. 

Que alguien se escandalice por unas nalgas, en 2022, me da incluso pena. Creer que un culo atenta contra los pilares de una sociedad es estar enfermo. Además que culo!! yo solo veo belleza, feminidad y arte en ese culo. Yo siempre había pensado que la liberación de la mujer, era entre otras cosas poder mostrar o enseñar sin por ello ser juzgada. Y realmente el culo o las nalgas de Chanel son una obra de arte, que vale la pena exhibir. Admirarlas no es ninguna falta de respeto u objetivización de la persona dueña de ese culo. 

El fallecido filósofo Antonio Escohotado decía "La verdad se impone siempre, sólo la mentira necesita de la subvención". Pues aquí está la prueba, menudo baño de realidad le ha dado el culo de Chanel a la mentira subvencionada con nuestros impuestos.