jueves, 31 de enero de 2019

Ansiedad y spanking II (Mi visión)




Hace un par de días, os compartía un artículo que firmaba una de mis divulgadoras francesas preferidas de todo esto junto con Amandine: Isabelle.

En dicho artículo Isabelle, nos contaba la estrecha relación que guardan ansiedad y placer, desde su punto de vista, en el cual nos venía a decir entre otras cosas que en sus juegos su pareja sabe conducirla a tal punto de tensión que el desenlace es un alivio.

Para entender esto hay que tener claro un concepto básico y es que no toda excitación es placentera, de hecho muchas cosas que nos resultan aversivas, angustiosas o desagradables nos excitan, por lo tanto la excitación es una sensación ambivalente que a veces anuncia placer futuro otras sin embargo, anuncia todo lo contrario.

Ante una situación que se prevee desagradable, la respuesta lógica sería la evitación, pero eso no siempre es posible y de hecho se nos educa precisamente haciéndonos pasar por situaciones desagradables como forma de corregir comportamientos de tal modo que en un futuro ese estímulo aversivo y el recuerdo del mismo se tan fuerte que haga que no se produzca la repitición del comportamiento no deseado. Pero nuestro cerebro reacciona y ante la imposibilidad de la evitación, reacciona generando ansiedad, tensión desagradable y a su vez con tal de soportarla crea también formas de huida virtual a esa situación y una  muy habitual es gestionar esa ansiedad o excitación negativa a través del placer y en concreto el autoplacer.

Es muy probable que ese descubrimiento del placer como forma de mitigar esa ansiedad negativa se produzca accidentalmente durante la infancia. El niño o la niña es ya capaz de anticipar situaciones negativas antes de que sucedan, eso le genera ansiedad y un dia en su agitación descubre que "tocándose" esa sensación "mala" disminuye o incluso desaparece, es una huida sin huir.

Y aquí si voy a pararme a hacer una distinción aunque a algunos les pese entre niños y niñas, mientras los niños inmaduros sexualmente al no eyacular no llegan al orgasmos, las niñas inmaduras sexualmente si pueden tener un orgasmo aunque no sean capaces de indentificarlo como tal.

"Mi primer orgasmo queriendo fue a los 12, pero con 8 o 9 recuerdo que ya me tocaba....." 

Esta confesión me la hizo alguien no hace mucho y sin indagar más se en que situaciones se tocaba cuando aun no sabía identificar que significación tenía eso. Estoy convencido que en situaciones de estrés y ansiedad.

Ahora imaginad una niña de 9 años consciente que ha hecho algo que está mal y que va a ser descubierta, que teme a la consecuencia o para el caso es lo mismo se siente culpable o ambas cosas, y ha descubierto que "tocándose" huye de esa sensación al menos momentáneamente. Ya tenemos el nudo, que lo une todo, ansiedad ante la previsión de algo malo de lo que no se puede huir y placer. Esa sensación primaria de ansiedad es muy parecida a la sensación de previsión del placer y que en la versión adulta conocemos comunmente como excitación.

La diferencia estriba en que esa concatenación de hechos pasa por un filtro, el de la aparición de la sexualidad adulta, que puede hacer que esa secuencias de hecho se pervierta y que el placer anterior a la situación desagradable, sea el premio final, que haya que pasar por la situación supuestamente desagradable, para llegar al placer final. Entonces tendriamos que de la secuencia original:

-Previsión de situación desagradable o culpa=excitación aversiva de la que no se puede huir.
-Placer como forma de gestionar esa espera, de huir sin huir
-Y finalmente enfretamiento de escena desagradable.

Es cambiada por:

-Previsión de situacion agradable= excitación positiva
-Excitación positiva que es mucho más intensa si digamos encuentra un obstáculo que vencer, una situación "desagradable" por la que pasar.
-Y finalmente el placer.

Anita Phillips en su libro "una defensa del masoquismo" dice:

"Los azotes son cualquier cosa menos placenteros, en cambio después de ello, nada ansía más el cuerpo dolorido que el contacto erótico".

Yo creo que tiene razón, yo no he conocido a nadie que me haya dicho que siente placer en los azotes, en cambio todas me han dicho y he comprobado que durante todo el proceso y habiendo terminado están visiblemente excitadas sexualmente.

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