¿Un juego fetichista?

¿Es el spanking un juego fetichista? ¿Es en si mismo un fetichismo? ¿Son muchos fetichismos juntos los que crean el juego?

Pues no tengo una respuesta concreta, supongo que depende para quien será una cosa u otra, de todas formas vamos a intentar analizarlo y ver un poco que es el fetichismo, que es un fetiche y que fetichismos o fetiches pueden darse en los juegos.

Un fetichismo consistiría en la excitación erótica o la facilitación de la misma a través o bien de una parte específica y parcial del cuerpo o bien a través de un objeto que tiene algún significado erótico para el fetichista. La definición de fetichismo ya nos da una pista; el fetichismo siempre es parcial, ya sea de forma directa, cuando el fetiche es una zona determinada del cuerpo (parte) o ya sea de forma vicaria a través de un objeto que cumple es función de "partir". Por lo tanto podemos distinguir dos tipos de fetiches que voy a definir como:


-Directos: el objeto de fetiche es una parte del cuerpo
-Indirectos: el objeto de fetiche es un objeto inanimado que "sustituye" simbólicamente una parte del cuerpo o algún otro simbolismo erotizado, pero siempre una cualidad humana.

Desde este punto de vista es fácil distinguir dos grandes fetiches en los juegos, que todos habréis identificado ya y que son una parte del cuerpo: el culo y las manos.

Podríamos decir que culo y manos son las dos grandes parcializaciones fetichistas del spanking. Su presencia en el juego es incuestionable y dependiendo del rol, ambas partes del cuerpo tienen una gran capacidad de estimulación fetichista en el otro. Los spankers con el culo y las spankee con las manos.

Si ahora os preguntase por otro fetichismo, casi seguro que saldrían a la palestra los instrumentos y aquí ya hablamos de un objeto propiamente dicho, por lo tanto debería entrar en la clasificación de fetiches indirectos sin embargo, yo sostengo la teoría de que simbólicamente, los instrumentos son percibidos como una prolongación del cuerpo de quien los maneja, osea que aunque sean un objeto inanimado, al manejarlos cobran animación y se fusionan con la mano que los maneja, le dan una sensación y percepción distinta al fetiche original del cual no son más que una mera prolongación y diversificación de las sensaciones producidas. A pesar de esto, los instrumentos también pueden tener el otro simbolismo fetichista el indirecto, osea que pueden excitar y estimular la imaginación solo que su visión e incluso pueden tener su valor como icono, osea como objeto sagrado que ayuda a dejarse llevar por un ritual. Así que como veis los instrumentos tienen o pueden tener todo el arco de diferente tipos de fetichismo.

Si tuviéramos que hablar de un tercero en orden de importancia, muy probablemente para mucha gente sería la ropa, aunque en el juego del spanking la ropa, no carece de tanta importancia como en otras fantasías si es bastante habitual, el uso de una o varias prendas "especiales". En este caso el fetichismo es indirecto a través de la ropa de "parte" el cuerpo, pero creo que en muchos casos, es más su utilidad como objeto que ayuda a completar un ritual de paso, lo que vendría a ser que a través de ponerse una determinada ropa eso consigue el efecto de entrar en la escena.

Hasta ahora os he hablado de fetiches visuales o sensuales (en el aspecto que provocan sensaciones físicas), pero también los hay por ejemplo auditivos.

La voz puede ser un fetiche que estimule a un lado y otro del juego,  por ejemplo una voz firme y serena seguro que provoca muchas cosquillas a un lado, lo mismo que sucede en el otro lado con una voz aniñada o incluso rebelde de esas que protestan al ser regañadas pero que a la vez que están  protestando se están excitando. Otro fetiche auditivo muy estimulante es el propio sonido de los azotes ¿Como suenan unos azotes? pues tienen varias cualidades, que lo pueden convertir en un poderoso fetiche auditivo. Para empezar suele ser un sonido monótono, constante, a un determinado ritmo y cadencia y de percusión. Un instrumento de percusión da siempre la misma nota, solo puedes variar la cadencia, el ritmo, acelerando o frenando, golpeando más fuerte o más suave pero la nota es la misma. Este tipo de sonido nos puede recordar al repicar de campanas, a un martillo golpeando un yunque, al teclear son sonidos que indican esfuerzo sostenido, disciplina y trabajo  manual por lo tanto algo mecánico que te permite hacer sin pensar y una posición fija y constante durante el trabajo. Luego podemos distinguir entre distintos sonidos, según el instrumento, el sonido seco de la madera, el restallido del cuero o el silbido agudo que precede a la picadura de la vara, pero ahí ya entramos en variantes de lo mismo, al final el sonido de unos azotes, es  un composición de percursión, que suele tener un ritmo determinado, que puede ser creciente o descendiente y que ese sonido suele impregnar la escena de juegos, tan solo roto o acompañado de suspiros, gemidos o quejas. Por lo tanto a todos un sonido que nos pueda recordar el sonido de unos azotes, no nos va a dejar indiferentes.

Y aunque la lista de fetiches podría ser interminable, por no extenderme en exceso, voy a terminar con otro fetiche muy común y con diversas posibilidades a uno y otro lado del juego, que es el fetiche gestual. Que serían aquellos gestos que tienen una significación y simbolismo asociados irremediablemente al juego. Yo me voy referir a uno que los spankers seguro que me entiende yo le llamo "poner cara de mala" y es que cuando hacemos algo que rompe las normas, se nos pone una expresión facial especial, que vendría a ser  un mezcla de satisfacción por transgredir y nerviosismo ante la posibilidad de ser descubiertos y esta expresión tiene mucha fuerza. No se supongo que desde el otro lado debe ocurrir algo parecido ante una mirada fija, penetrante e inquisidora ¿no?. Luego ya vendrían otros del tipo, remangarse los puños de la camisa, advertencias gestuales o incluso ya más implícitos como el gesto de quitarse el cinturón.

Ya no me enrollo más a modo resumen, yo creo que este juego es un tipo de juego erótico que vive de la fascinación por el detalle, en si mismo es un fetichismo, pero dentro del mismo hay un montón de fetichismo más y las posibilidades y combinaciones de ellos ya es una cuestión de gustos, porque son casi infinitas.

Y para terminar un juguete diseñado específicamente para estimular no es fetiche, por lo tanto el "satisfayer" no es un fetiche sin emabargo, un objeto que no ha sido específicamente diseñado para estimular pero puede ser usado como tal si lo sería,  un ejemplo: el mango de un cepillo.