Llegué a casa cómo de costumbre, ella ya estaba como también era habitual.
- Hola!!!!
- Hola ¿Que tal el día?
- Bueno más o menos ¿Y tú?
- Pasable, también
- ¿Vas a ir a algún sitio?
- No ¿Por?
- Cómo vas con ropa de calle aún
- Bueno me he estirado un rato, pero tengo que ponerme con la presentación, ahora me iba a cambiar y encerrarme un rato en el despacho.
- Pues yo me voy a dar una ducha y a ocupar el sofá.
- Todo tuyo, pero sólo un rato!!!!
Los dos nos fuimos a la habitación, yo cogí ropa, mientras ella se ponía el pijama. Yo me fui para el baño y ella para la habitación/despacho. Me di una ducha y ya cómodo, me apalanqué en el sofá. Llevaba ya cómo media hora, cuando me apeteció, una cerveza y fui a buscarla a la cocina, al pasar por delante del despacho tenía la puerta entreabierta y miré, allí estaba sentada en la mesa, con los cascos puestos y mirando atentamente la pantalla del portátil. Cogí la cerveza y de vuelta al sofá, volví a mirar, pensé que igual estaba viendo y escuchando algo para documentarse y me fui para el sofá.
Un rato después, ya me había terminado la cerveza y fui a tirar el envase a la basura y otra vez miré y seguía con los cascos mirando la pantalla y ya empezó a resultarme algo sospechoso. De vuelta llamé a la puerta y se giró quitándose los cascos, a la vez que movía el ratón de una manera apresurada y su expresión era cómo de entre sorpresa y nerviosismo.
- ¿Tienes para mucho?
- No...bueno, una media hora más o menos y ya sigo mañana.
- Me tendrías que hacer un favor
- Dime
- Déjame dos minutos el portátil, que me han enviado un WhatsApp, y tengo que enviar un correo, no tardo nada.
- Vale...así voy a beber algo.
Se levantó, entré y me senté, esperé a que saliera y me fui directo al historial, cuando lo vi, no salía de mi asombro, había estado todo ese rato viendo vídeos...de spank...cuando volvió.
- Ya estoy, casi.
- Haz tranquilo, no creo que vuelva a ponerme ya hoy
- ¿Y eso?
- Estoy saturada...mejor lo dejo y sigo mañana.
- Ya, imagino que eso de buscar información y documentarse, es tedioso y aburrido.
- Pffff un palo.
- Ven que te enseño una cosa.
Se acercó y al llegar a la mesa se inclinó para ver la pantalla, en la que había puesto el historial. La miré y se puso roja al instante.
- Interesantes páginas, para "documentarse"..
Se quedó en blanco...sin responder.
- Vaya,vaya....así que todo este rato, donde se supone estabas trabajando, resulta que estabas haciendo otra cosa...
- No te enfades, es que no me inspiraba...
- No estoy enfadado, vamos no porque veas vídeos, ahora que intentes tomarme el pelo ya es otra historia.
Me levanté y la cogí del brazo , poniéndola a la izquierda de la silla
- Pon las manos sobre la cabeza.
Resopló pero lo hizo y nada más hacerlo de un tirón le bajé el pantalón del pijama y las braguitas hasta los tobillos.
- Ahora, el que va a "documentarse" soy yo, igual alguno de estos vídeos me da la inspiración, para castigarte adecuadamente y mientras te quiero aquí , en silencio, inmóvil y mirando también ¿Está claro?
No contestó. Me senté y empecé a abrir videos, de vez en cuando hacía algún comentario mirándola, del tipo...
"Ufff eso debe picar" " o " Ese es el color ideal para el culo de las chicas traviesas".
Al tercer vídeo ya me cansé, cerré sesión y me levanté, la miré.
- Levanta el pie.
Lo hizo y me agaché, le quité el pantalón y las braguitas de un pie y después del otro, cogí la ropa.
- Hasta el pantalón del pijama está mojado, señorita!!!
Se puso aún más roja.
- Date la vuelta.
Lo hizo y nada más hacerlo pasé mi mano izquierda por su cintura bajando por el pubis, buscando su entrepierna.
- Anda que como estás, cochina y yo pensando que estabas trabajando.
En ese momento le metí un dedo.
- Saca el culo!!!
Le dije dándole un azote.
Se inclinó un poco hacia delante y en cuanto lo hizo y sin sacar el dedo de su sexo, empecé a azotarle el culo, alli de pie.
- La próxima vez, bueno no va a haber próxima vez te lo aseguro.
Estuve un buen rato zurrándole bien el culo allí en medio del despacho, de pie y sin quitarle el dedo del sexo. Pero la posición era bastante incómoda y a los pocos minutos me cansé. Paré, le quité el dedo, la cogí le brazo y caminamos en silencio hasta el baño, sin soltarla le dije.
- Coge el cepillo de ducha
Resopló, sabe perfectamente lo efectivo que es. Le di un par de azotes sin soltarla
- Coge el cepillo.
Lo cogió.
Y sin soltarla la llevé a la habitación. Al entrar la solté y le dije.
- Túmbate boca arriba.
- Santi....
La miré muy serio y no tuve que repetirlo, se tumbó. Entonces le cogí el cepillo de ducha.
- Levanta las piernas...
Volvió a suspirar y las levantó. Con la mano izquierda le sujeté los tobillos.
- Cuando termine, te vas a sentar a ver un vídeo y así podrás empatizar bien.
Empecé a azotarla en aquella posición tan vergonzosa con el cepillo de ducha, alternando cachete y cachete, y apuntando bien a la parte baja de las nalgas, que a los pocos azotes, marcaban dos "ojos de buey" bien rojos. Me apliqué a conciencia en la tarea, quería que sintiera bien los efectos de su travesura más tarde. Cuando estuve seguro que así sería, paré. Le solté los tobillos y dejo caer los pies al suelo suspirando de alivio, pero apenas le di tiempo a respirar, sin soltar el cepillo, la cogí del brazo haciendo que se levantase.
La llevé de vuelta al despacho y allí le dije
- Siéntate y abre sesión.
Se sentó despacio, yo me quedé frente a ella mirando. Y con el cepillo amenazante en mi mano.
- Ahora ponte un vídeo de los que has visto y empieza a tocarte.
Se puso roja...le dio al play de uno de los vídeos y tímidamente llevo su mano entre sus piernas. Yo la miraba fijamente, allí sentada con el culo ardiendo masturbándose delante de mi, mientras miraba un vídeo.
- Señorita no tenemos toda la tarde, te doy 5 minutos o nos vamos al salón te tumbo en mis rodillas y te pongo el culo morado con el cepillo.
Y al parecer mis palabras surgieron efecto, los cinco minutos , no fueron ni tres cuando se estremeció en un intenso orgasmo masturbándose frente a mí...
La dejé saborearlo del todo y recuperar el aliento.
Entonces le dije.
- Recoge la ropa, cierra el portátil y te espero en el sofá.
Mientras ella recogía, fui a dejar el cepillo al baño y cogí la crema.
Cuando apareció, le dije que se pusiera frente a mis rodillas, con las manos detrás de la espalda.
- Mírame y escucha con atención. He estado pensando y cómo al parecer para trabajar te inspira ver vídeos, que es una tontería pudiendo tener lo mismo de verdad, es más estoy seguro que con el culo bien calentito, aún te inspirarás mejor, así que a partir de mañana, antes de ponerte te calentaré bien el culo. Así que te esperas a que venga y cuando yo esté aquí y quieras ir a trabajar en la presentación, me vas pedir que te zurre el culo para evitar tentaciones ¿Está claro?
No contestó sólo bajó la mirada.
- Te he hecho una pregunta, responde.
- Si....
- ¿Que me vas a pedir?
- Que me zurres el culo...
- ¿Para?
- Para evitar tentaciones....
Me di un golpe con las palmas de las manos en las piernas, para indicarle que se tumbara, lo hizo y dejé caer un chorro de refrescante crema en cada nalga y empecé a extenderla muy suavemente...