martes, 23 de julio de 2019

La del coño peludo.




Hoy me vaís a permitir colgar una entrada que se va un poco del tema central del blog, aunque como guarda relación con el sexo y el erotismo me voy a permitir una licencia.

Todo viene a partir de un artículo que he leido en eldiario.es, para quien no lo sepa es un medio "progre" que no de izquierdas, ya que ser "progre" es ser básicamente tonto y ser de izquierdas es algo muy serio. Un "progre" suele ser alguien generalmente urbanita de clase media, que cree que desde el bar de la facultad "osea tío o tía" o desde alguno de esos ateneos y demás imbecilidades va a arreglar el mundo, es más se suele otorgar una superioridad moral en todo su pensamiento mágico, mágico por alejado de la realidad y para añadirle más se suelen otorgar la representación de colectivos, colectivos como por ejemplo el mundo obrero que no conocen salvo por el camarero que les sirve los gin-tonics en el bar de moda de la ciudad. Dentro de ese mundo "progre" están las feministas de nueva ola, que claro hablan siempre en nombre de todas y cada una de las mujeres, en vez de hablar en su nombre, ya que así esconden su estulticia bajo el paraguas de un supuesto grupo que ni existe y en caso de existir no les ha elegido como representantes.

El artículo tiene el sugerente titulo de "pelos en el coño". En el la autora "progre-feminista" narra toda ofendidita ella una anécdota personal con la cual hace la puta trampa de convertirla en generalidad, pero ni con esas se sale, vamos como mucho ha conseguido el aplauso fácil de los y las creyentes, pero vamos a estos les dices que Cristo llora sangre cada Viernes Santo y se lo creen.

La ofendidita narra la siguiente escena:

"Después de todo el magreo en el bar y de los lametazos en cara y tetas, el colega me baja la falda.

-Joder B. pensaba que lo llevabas más arregladito."

Y repite toda ofendida.

"Si habéis leido bien: pensaba que lo llevarías más arregladito".

Luego sigue el relato lacrimógeno como a partir de aquella experiencia empezó a ceder en la terrible tortura impuesta por el heteropatriarcado de afeitarse el chichi.

En todo el puto artículo no hay un solo ápice de autocrítica, la culpa siempre para la sociedad, balones fuera, los hombres malos, el porno y la puta cantinela de siempre. Y la colega no se da cuenta que ella misma se está  poniendo de tonta del culo manipulable que cedió a algo que no quería por un tío una noche, "Ke biba" el empoderamiento" pero solo la puntita de empodaremiento.

Pero lo que más me repatea del artículo no es eso, si esta chica es tonta o tiene poca personalidad problema suyo y del medio donde escribe. Lo que me revienta es que el famoso "no es no" ainssss amigos como cambia cuando un tío en su libre capacidad de decisión decide pues no comerse un coño peludo, porque no le sale de ahí, entonces ya el "no es no" no vale, donde se ha visto que un tio ponga cachonda a una tía, pase el tercio de varas, las banderillas y cuando llega el momento estoque diga:

-Sabes que te digo que se me ha cortado el rollo.

Entonces no es libertad, entonces no es empoderamiento, entonces es un complot contra los pelos del coño de la sociedad heteropatriarcal. Vamos que ellas lo pueden decidir todo, pero tu si empiezas estás obligado a terminar, de lo contrario estás haciendo un feo y traumando a la pobre chica que después pasó años afeitándose el coño del trauma. Es que ya se sabe los tíos estamos obligados a cumplir como machos que somos y vamos pobre de ti que des un gatillazo, tengas un mal día o no te apetezca comerte un coño peludo, que la hombría heteropatriarcal se pondrá de inmediato en duda.

A ver señorita feminista "progre" que va de liberada por la vida, todo es mucho más sencillo, si tu en tu en el libre ejercicio de tu libertad decides no arreglarte el coño, me parece genial, nadie te obliga, pero entiende que tu tampoco puedes obligar a nadie que no quiera bajar a la taiga, habrá a quien le guste y a quien no y ahí entra la libertad del otro en decidir si baja o no baja, incluso aun cuando haya empezado algo, el "no es no" debe ser para todos, para nosotros también.

Y luego igual que tu tienes la libertad de conservar la taiga virgen, otras preferirán segar el césped o incluso hacerlo desaparecer del todo y eso, osea libertad de poder elegir todas la variables es el verdadero empoderamiento, sin que neo monjas vengan a dar sermones de moral sobre que hacer o que no hacer y el empoderamiento está también en que el resto no tengamos obligación de nada si no nos apetece y eso incluye a los hombres, por mucho que te haya magreado las tetas antes, porque entiendo que si eso pasó es porque tu querías y fuiste cómplice de ello, al igual que tu en todo momento tenías la libertad de decir hasta aquí, el también la tiene y si no le gustó tu coño, se siente la vida es dura, a todos nos han rechazado alguna vez.

Así que "progre feminista" deja de poner excusas y si quieres llevar el coño peludo hazlo, pero no nos cargues al resto tus propias contradicciones, hazlo en consecuencia, a sabiendas de ventajas e inconvenientes, que sois unos putos narcisistas, que solo habláis de derechos, nunca de obligaciones y por supuesto pensáis que el resto del mundo hemos nacido para complaceros y  como dice Camille Paglia: "la vida es dura, acata las consecuencias de tus decisiones y sigue adelante".

Por cierto Camille Paglia es feminista, pero de las de verdad, no de las que usa ser mujer como excusa para justificar sus errores o malas decisiones.

1 comentario:

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