Sin motivo también. (La libreta XIII)

La idea me vino de repente en medio de una de nuestras charlas telefónicas de cada noche.

-Entonces mañana te vienes?
-Si que tengo ganas
-A la hora de siempre supongo
-Ya te diré pero cuenta con ello si
-Genial y más sabiendo que esta semana no te he dado "motivos".
-Entre semana no, pero aun queda el fin de semana.
-Vaya entonces no ha premio?
-Premio por hacer las cosas como Dios manda?....desde cuando?
-Eres un cabronazo
-Eso ya lo sabías
-Por una vez te voy a dar la razón y debería ir tirando a la cama, que si no duermo se me pone mal humor y no quiero estropear mi libreta jejejeje.
-Anda tira mañana hablamos y concretamos.

Nos despedimos y yo también me fui a la cama. Y antes de dormirme reflexionado, llegué a la conclusión que igual tenía razón y que porque no un premio. Llevábamos los dos unas semanas de trabajo horribles, encima el invierno estaba siendo tozudo y parecía no querer dejarle paso a la primavera,así que tal vez nos iría bien a los dos salir un poco de la rutina, era justo de tiempo pero posible si me movía rápido y lo primero pasaba por contarle mi idea, que fue lo primero que hice al levantarme: llamarla.

-Buenos dias
-Buenos días y esta llamada tan temprano?
-Pues nada que quiero comentarte una cosa. Ayer estuve pensando y creo que tienes razón, te mereces un premio
-Ya te lo decía yo
-Pues que te parece si cambiamos el plan
-Como? explícame
-Pues que te parece si nos vamos el fin de semana por ahí
-Un poco justo de tiempo no crees?
-No, si me das una hora te explico
-Vale, vale tu mismo.
-Pues en un rato te llamo.

Me puse enseguida a ello, debía ser un sitio cerca para ambos y que tuviera algo diferente, encontré un pequeño hotelito en un precioso pueblo de costa a 20 minutos de la estación de tren, no lo pensé más reserve habitación , saqué un billete para ella y la llamé.

-Hola otra vez
-Hola, me tienes intrigada así que cuenta sin rodeos.
-Vale pues sin rodeos, cuando salgas de currar, haz la maleta para un par de días ropa cómoda, te acabo de enviar al correo un billete de tren, así que a las 18:00 tienes que estar en la estación con el billete impreso, yo te recojo en destino, ¿alguna duda?
-Si que estás loco, pero me gusta el plan, donde vamos?
-Ya lo veras, si tienes alguna duda me llamas
-De acuerdo, pues nada nos vemos luego
-Eso que tengo muchas ganas

Sabía que había acertado, porque no hubo ninguna pregunta ni tampoco ninguna negativa, en plan es muy justo de tiempo, tengo cosas que hacer....señal que la idea le había le gustado. Al cabo de un rato me envió la foto del billete impreso y ya por la tarde, me envió un mensaje para decirme que iba camino de la estación y otro cuando ya estaba montada en el tren. Que fue cuando yo hice la maleta y me fui a buscarla a la estación de destino. A la hora prevista de llegada del tren ya llevaba un rato allí, el tren llego puntual y busqué su silueta de entra le gente que salía por el pasillo. La vi enseguida arrastrando una pequeña maleta, un beso de bienvenida y nos montamos en el coche. Durante el trayecto me preguntó varias veces donde íbamos, mi respuesta también se repitió.

-Ya lo verás impaciente.

20 minutos después de haberla recogido en la estación se abria la barrera del parking de un hotelito encantador en primera linea de mar. Aparcamos hicimos el trámite del chek-in y nos dieron la tarjeta de la habitación: la 325. Osea tercera planta con vistas al mar. Subimos hasta la habitación entramos en ella, una habitación moderna y equida. Entrando había un pequeño pasillo a la derecha estaba el baño completo y al final del pasillo la habitación, una gran cama de matrimonio enfrente una especie de escritorio con la tv y una silla, mas adelante el armario y frente al armario un sofá con vistas a la cristalera de la terraza, desde la cual solo se veia mar. Al entrar ella se dejo caer boca arriba en la cama...

-Pufffff estoy muerta

Mientras yo descorría la cortinas del balcón para disfrutar de las vistas. Me fui a buscarla, le di la mano para que se levantase, mientras le decía.

-Luego tendremos tiempo de sobra para "descansar" si quieres hasta te hago un masaje, pero ahora tenemos que bajar al comedor que tenemos mesa para cenar. Se levantó dejó la maleta en el armario y antes sacó el neceser.

-Pues si vamos a cenar al menos me voy a dar la raya del ojo y los morritos, no tardo nada. Yo salí a la terraza a fumar mientras la esperaba, hacía una brisa fresca, olía a sal y aunque de noche ya el sonido hiponotizante de las olas al romper lo invadía todo.

Cuando estuvo bajamos a cenar, teniamos una mesa íntima también con vistas al mar, cenamos sin prisa, charlando y riendo con la tonteria nos bebimos entre los dos una botella de un vino blanco que entraba genial, hasta el punto que pedimos otra para la habitación. Cenados volvimos a subir, nos pusimos cómodos abrí la botella y serví dos copas, nos tomamos la primera charlando en el sofá con las vistas al mar y al terminarnos la copa, le dije.

-Lo prometido es deuda venga quítate la ropa y túmbate que te hago ese masaje.
-Mmmmmm vale, pero ponme otra copita.

Se la puse mientras se desnudaba, no tardó nada en quedarse solo con un tanga negro y entonces le di la copa, la cogió, se tumbó en la cama boca abajo y dejó la copa en la mesilla a su alcance. Yo mientras cogí el aceite de mi maleta y apagué todas las luces dejando solo encendida una luz indirecta que había encima de la mesillas, para rematarlo todo busque en la tv una emisora de radio con música relajante, me subí a la cama, le eché un chorro de aceite en la espalda que hizo que se quejase del frio y empecé a hacerle un masaje a conciencia, por los brazos, hombros y espalda, de vez en cuando escuchaba algún gemido de placer, al terminar con la espalda me salté a caso hecho el culo, para seguir con las piernas, echando dos chorros de aceite en cada pierna, momento que ella aprovechó para darle un trago a la copa de vino y empecé el masaje por todas las piernas desde los muslos hasta los pies con la misma dedicación que con la espalda, entonces fui a coger de nuevo el aceite para dedicarme a la parte que me faltaba y algo llamó mi atención, estaba inmóvil y hacia un rato que solo se esuchada respirar, la miré y se había quedado dormida como un tronco, sonreí, dejé el aceite en la mesilla, la tapé , apagué las luces y me fui a dormir también. Dormí como un bebé, cuando desperté eran las 9, ella seguía durmiendo profundamente ni se había movido, me levanté sin hacer ruido, fui a la maleta a por ropa y me metí en la ducha. Al salir un voz de sueño me dijo medio bostezando.

-Joder que haces levantado tan pronto es Sábado.
-Bella durmiente son las 10 casi y antes de y media tenemos que desayunar o nos quedamos sin.
-Puffff paso..no desayuno
-Estas segura?

Hubo un tiempo de silencio hasta que perezosamente se incorporó para sentarse en la cama y decirme.

-Siempre tengo el mismo dilema entre el hambre y el sueño, ayer me quedé frita, de lo ultimo que me acuerdo son de tus manos en mis piernas
-Has descansado?
-Siiiiiiii mucho

Me dijo mientras se estiraba sentada en la cama y torpemente se levantaba.

-Venga va voy a darme una ducha yo también.

Se duchó. nos vestimos y bajamos a desayunar, después de desayunar cogimos el coche y nos fuimos todo el día de ruta por la costa, hacía un dia espléndido y soleado de principios de primavera, así que lo aprovechamos y cuando anochecía volvimos para el hotel, teníamos mesa para cenar, pero aun faltaba un buen rato, asi que nos apalancamos en la  habitación. En un determinado momento, yo estaba fumando en la terraza y ella apalancada ocupando el sofá me miró y con sonrisa pícara me dijo.

-Se lo que estás pensando
-¿Como?
-Si, si hazte el tonto
-No entiendo que quieres decir

Soltó una carcajada.

-Pues que ni tienes motivos, ni te los pienso dar, así que estás maquinando como pillarme, pero va a ser que no, que te vas a quedar con las ganas

Realmente no estaba pensando en eso, estaba en blanco, pero al decirlo tan abiertamente, estaba claro que me estaba retando.

-Tu crees?
-Si creo que?
-Que no te voy a pillar
-Jajajajaja, pocas veces he estado más segura
-Igual es lo que quiero que te confies
-Que excusa más mala, reconocelo estás perdido

En ese momento entré en la habitación y sin calcularlo le dije.

-A ver enséñame la libreta.
-Que libreta?
-Cual libreta va a ser, la de tus faltas.
-Si no hay ninguna y lo sabes
-Ya, pero quiero verla
-Pues como no la vayas a buscar, no la he traido
-¿Como?
-Pues eso, para que, si no habia nada
-Y? La libreta debe ir siempre contigo, vamos al menos siempre que estemos juntos
-Desde cuando?
-Desde siempre y lo sabes
-No, no, no voy a caer
-Como que no vas a caer, si tienes un norma es para cumplirla y la libreta?
-Ya te lo he dicho no está
-Osea que lo dices en serio, te la has dejado?
-Claro
-Muy bien, ya puedes levantarte
-Eso no vale, te acabas de inventar esa norma.
-O te levantas o te levanto

No se levantó obviamente, así que la levanté, a pesar de sus quejas, hubo un pequeño intercambio de pareceres, pero que solucioné rápido sentándome yo en el sofá y haciéndola tumbarse encima de mis rodillas boca abajo, no dejaba de protestar, pero ni caso a sus quejas, empecé a azotarla con la mano por encima de los vaqueros que llevaba, una tanda de azotes rápidos y seguidos, mientras ella seguía protestando todo sea dicho con más cuento que otra cosa, cuando me cansé de dar sobre los vaqueros, la hice levantarse y empecé a desabrocharle los botones de los vaqueros, ella seguía protestando pero se dejaba hacer, en el momento que se lo bajé hasta las rodillas le dije.

-Ya vale ¿no?

Se quedó callada momento que aproveché para bajarle también el tanga y le dije.

-Pon las dos manos encima de la cabeza.

Para darle más credibilidad a mi orden, le di azote nada más decirlo y fue automático azote y manos inmediatamente encima de la cabeza y a la vez un de mis manos se fue a su coño.

-Tanta queja, tanta queja y estamos así?

Se puso roja e inmediatamente quité mi mano de entre sus piernas, la pusé otra vez de un tirón en mis rodillas y empecé a azotarla de nuevo, ahora ya directamente sobre su piel, una lluvia incesante de azotes, con ese sonido tan especial de la pie chocando contra la piel, de vez en cuando paraba, la recolocaba en la posición ideal con el culo cuanto más expuesto mejor y continuaba con la azotaina, el escándalo de los azotes eran considerable, por un momento pensé que igual nos llamaban la atención pero seguí  hasta ponerle el culo incandescente, con ese rojo tan especial e intenso que solo provocan  los azotes con la mano, miré el reloj eran las nueve menos cuarto, sonreí le separé los muslos, busqué con mis dedos su sexo desde atrás le di unos cuantos azotes, para estimular, despues me puse a resiguirle el contorno de los labios usando el pulgar y el índice a modo de pinza, mojada no es la palabra, era un fuente, le metí el pulgar y empecé a friccionarlo contra la pared rugosa del principio de la vagina, a la vez que con el resto de mano frotaba toda la vulva, el culo rojo y caliente y el coño mojado es sinónimo de orgasmo rápido y así  fue ni dos minutos me llevó hacer que se corriera, le di un minuto de recuperación y le dije.

-Ahora vístete que bajamos a cenar, ponte falda y no te pongas ropa interior

Se levantó y se frotó el culo nada más ponerse de pie, le quité las manos.

-Muy mal eso de frotarse sin permiso
-Es invierno sin medias no voy a ponerme falda
-He dicho sin ropa interior, medias ponte, pero nada debajo
-Pero las que tengo son tipo pantys
-Pues ponte esas.

Nos vestimos y bajamos a cenar, durante toda la cena, estuvimso jugueteando con su doble incomodidad, una el escozor de la azotaina y dos la reacción que el escozor provocaba en su cuerpo aumentado por el hecho de no llevar ropa interior. Al terminar de cenar subimos de nuevo a la habitación  y nada más entrar le dije.

-Lo de antes era solo el aperitivo.

Cogí las tres de las cuatro almohadas que había en la cama y las puse en el borde lateral el que daba a la terraza, empezó a protestar de nuevo, así que la cogí de la mano y la llevé a la posición para continuar el castigo, me senté antes para meter mis manos pro debajo de su falda, buscar la cintura de las medias y bajarlas hasta las rodillas, me levanté le di la vuelta e hice que su tumbase con boca abajo con las almohadas debajo del pubis levantando bien el culo, una vez puesta le levanté la falda, aun lo tenía algo rojo. Me desabroché el cinturón de cuero marrón que llevaba, lo doblé y me puse a un lado, lo posé sobre su piel desnuda e indefensa y empecé a azotarla con el cinturón, una quincena de azotes seguidos y sin pausa, si antes con la mano el escándalo era evidente, ahora con el cinturón aun el sonido era más sospechoso, así que puse la tv y subí el volumen para disimular algo, entonces me cambié de lado para igualar, la nalga donde impacta la punta siempre sale más perjudicada, así que desde el otro lado le di otra quincena de azotes seguidos y en ambas nalgas se podian ver los dibujos del cinturón sobre todo en la zona final del impacto, dibujando una especie de nube roja con puntitos mas oscuros en todo su culo. Entonces dejé el cinturón doblado encima de su espalda, donde se doblaba la falda, fui a por mi móvil y le hice una foto, de vuelta comprobé su excitación directamente con mi dedos en su coño, la estampa era preciosa pero faltaba algo, me fui a mi maleta, a buscar el plug metálico con rugosidades de menos a mas y terminando otra vez en menos, lo lubriqué en su coño, al notar el frio del metal suspiró, separé sus nalgas con mi mano izquierda y con la derecha sin mucho miramiento se lo metí apretando, hasta que desapareció entero en su culo, quedando solo fuera la piedra decorativa.

Entonces la cogí de la mano, la ayudé a levantarse y la llevé hasta la cristalera a modo de rincón, allí la puse con la nariz pegada al cristal. las manos encima de la cabeza y la falda enrollada por encima de la cintura. Yo me senté en el pequeño sofá me encendí un cigarrito y me dediqué a sacarle unas cuantas fotos en el rincón, cuando terminé el reportaje fotográfico la llamé, otra vez ella de pie con las medias a medio bajar frente a mi sentado en el sofá, metí mi mano por la falda que había caido y comprobé otra vez lo mojada que estaba.

-Eso vamos a tener que aliviarlo o te vas a deshidratar, pero antes me vas a tener que ayudar.

Quité la mano y me desabroché el pantalón, me lo bajé un poco y la ropa interior, no tuve que decirle nada se arrodilló entre  mis piernas , me agarró la polla con una mano y empezó a pasar la lengua despacio por la punta, resiguiendo todo el borde del glande varias veces, hasta que se la metió en la boca y empezo a subir y bajar la cabeza, me fui dejando llevar, en un determinado momento la cogí de a cabeza para ayudarla acompañando su movimiento, pero si seguía me iba a correr y no quería aun, aprovechando que la tenía cogida de la cabeza la hice parar, nos levantamos, la llevé a la misma posición de castigo encima de las almohadas, solo que esta vez no para azotarla, sino para follarmela desde atrás, con la mano derecha la agarré con fuerza de las caderas y con el pulgar de la izquierda aguantaba el plug que no se saliera, así estuvimos un buen rato, alternando diferentes ritmos a veces la sacaba despacio para metersela de golpe y de repente cambiaba el ritmo para empezar a bombear lo mas rápido que podía, ella se corrió varias veces y entonces decidí que era mi turno la agarré con fuerza con las dos manos de las caderas y empecé a follármela lo más rápido que pude hasta correrme del movimiento el plug se había salido y con mi polla aun dentro, se lo volví a meter...

-Ya te lo quitaré yo cuando toque.

Nos terminamos de desnudar y nos estiramos en la cama a recuperar, relajados y satisfechos, sin decir nada, yo le acariciaba el culo aun muy caliente, me fui relajando cada vez más hasta que de repente algo me despertó un líquido frio me entraba por la oreja y me mojaba la cara, me despejé de golpe y la vi desnuda riendo con un botellín de agua en la mano, me levanté y me fui  hacia ella.

-Vamos que no has tenido bastante, pues eso tiene fácil arreglo

Sin soltarla me fui hasta el baño, sabía que en su neceser estaría el cepillo de madera cuadrado, lo cogí  y de vuelta a la cama y de nuevo a mis rodillas...

-No te pongas así , si solo era un broma, además me escuece aun.
-Pues más te vas a escocer.

Empecé a azotarla con el cepillo, sobre su ya perjudicado culo, sin compasión y aguantándole el plug con un dedo de la otra mano, mientras alternaba cachete y cachete en los azotes, sobre todo en la parte baja y alguno también en la parte alta de los muslos que la hicieron saltar.

-Mira tu por donde, en tu semana sin faltas, tampoco te vas a poder sentar unos días.

El cepilla caía sin piedad sobre su culo, hasta que la parte baja se puso de color escalata brillante, entonces paré, le mandé levantarse y volverse a poner sobre las almohadas, para volver a follármela desde atrás, se que el choque de mis embestidas contra su culo recién castigado y dolorido, la excita mucho y se volvió a correr varias veces y yo otra más, entonces le saqué el plug, la tentación de cambiar de agujero, era muy importante, pero lo cierto es que estaba muerto, así que pasamos a la parte mimos, caricias y cremitas que las necesitaba.

El día siguiente no madrugamos, aprovechamos hasta última hora la habitación antes del check out. Después fuimos otra vez de ruta, hasta las 19:00 que la dejé en la estación. Allí nos despedimos, antes de irse, le puse la mano en el culo y apreté fuerte. Se quejó

-Cabrón...
-No te quejes que los asientos del tren son cómodos jajajaja.

Se montó en el tren y quedamos para la semana que viene, yo volví para casa, al llegar le envié un mensaje con las fotos, la de sobre las almohadas con el cinturón y las del rincón con un pie de texto.

-Para que no vuelvas a olvidar la libreta...

Tardó en contestarme unos minutos.

-Uyyyy a veces tengo muy mala memoria.
-Bueno  hoy no que llegarás tarde, pero mañana para ejercitar esa memoria, cuando estés comoda en casa coges la libreta y copias en ella 100 veces: "No olvidaré más la libreta, en las citas". Y ya sabes sentada con el culo desnudo, en la silla de la ropa...
-Pufffff cabrón...
-Ya,  ya, pero seguro que como poco despues de copiar un orgasmo cae
-O dos...

Continuará.