La cabaña de la playa II parte (Por Silvia)

"Arelo misteriosamente

o raio que metade feitizo

rasgue o teu ollar e che desperte 

dese letargo de preocupacións.

Que fulmine

os ocos que non teñen gardian 

e eses silencios que violan as dores.

Lanzoche  un beixo

ceibe por o teu rostro,

pousoche unha palabra nos beizos: paixon

E sintome pequena

mentres ti xogas a ser a autoridade

Pero mirasme

e o poema desfaise.

con cada ollada

desfas cada noite o ceo...."

_No es por nada, te quedan diez minutos nena

_ Que si pesadooo, ya voy déjame solo quiero acabar esto que estoy escribiendo

_ Y si lo acabas mañana

_ Mañana se me van las ideas, además es para ti.

_ No te preocupes yo te daré ideas

_ No puedes no es un relato es un poema, da igual lo dejó no me apetece metermee en líos, cepillo los dientes y voy. 

A las 11 estábamos los dos en cama.

_ Lo ves si no era tan difícil

_ Si ayer también me vine temprano... Sólo que...

_ No querías dormir y lo peor no querías dejarme dormir a mí y te tuve que dar tu dosis de tranquilidad

_ Anda déjalo, ya está! Y si me das un masajito

_ Vale... Bueno te lo cambio por un relato

_ De acuerdo ves Rey, si cuando razonas es fácil

_ Jajaja jajaja

Me masajeó y pronto me dormí. Más teniendo en cuenta que la noche anterior no había pegado ojo. Nos dormimos abrazados y nos despertamos en la misma postura. Se levantó y me queda en cama invadiendo su sitio. Se fue a desayunar.

_ Te dejo café

_ Y mi beso. Yo no te enseñé a irte así!

Yo  tenía el día libre, el trabajaba hasta el mediodía. Me levanté con calma recogí la habitación y preparé una pequeña maleta para tres días de playa. Al prepararla yo, sabía lo que iba. Ninguno de sus juguetitos ni utensilios. Aunque bueno pensándolo bien se basta y se sobra con su mano.

Cuando llegó comimos, y como las cosas ya estaban listas fuimos a hacer unas compras de última hora. Un bote de protector solar y unas chanclas para el y poco más. 

_ Venga elige ya 

_ Ya voy, impaciente, podías ayudarme

_ No son para mi

_ Depende igual las tengo que usar contigo, jajaja jajaja. ( Con la risa más maquiavélica del mundo)

Ahí mi perturbación paso de cero a cien en segundos. 

_ Ni lo sueñes, me voy a portar tan súper bien que hasta te extrañaras, aunque busques no encontrarás un motivo....

_ Jajaja jajaja ni en dos vidas me lo creo. Verás lo que tardas

_ Bah mira estas rojas te combinan bien con el bañador 

Las giró y le miró la suela, 

_ Si estás me gustan.

Pagamos y nos fuimos a tomar un café y cogimos el coche directos a Lires que queda a menos de una hora de casa. 

_ Ya verás al final é cogido la cabaña suite es más grande, tiene jacuzzi en la terraza. Podemos ir a pescar, o hacer una ruta en bici, porque no sé si te lo comenté hay bicis....

_ Nena tenemos 3 días no tres semanas

_ valeeee

Ella llevaba un vestido veraniego que le sentaba genial era largo y finito con un escote de vértigo, de tirantes, le dejaba los hombros al descubierto y en la espalda tenía un trozo de encaje. Era espectacular nunca se lo había visto, de ser así me acordaría

_Me mira usted mucho sr conductor

_ Como para no mirarte, es lo que tiene ponerse tan guapa señorita, que luego te miran.

_ Gracias

_ Ese vestido nunca te lo había visto, no será nuevo?

_ Jajaja jajaja jajaja ahí vamos, que no me pillas 

_ ¿Que?

_ Que lo estreno hoy pero lo tenía en casa, me lo había comprado a finales del verano pasado. 

Aún le quedaban casi 2 semanas sin poder hacer ningún tipo de compra desde el último castigo. Le había puesto un mes. La verdad es que me sorprendió.

Al llegar me asombro que para ser un pueblo tan pequeño había muchas casas de turismo rural, y bastante gente. Era un puente que caía a finales de mayo y el tiempo venía muy bueno. La primera oportunidad de playa. Además el camino en pleno auge. Déjanos las cosas en la cabaña que por cierto me sorprendió era preciosa muy acogedora de madera, y con materiales reciclados que devuelve el agua. Lo primero que hice al llegar y dejar la maleta, fue apartarle el vestido y besarle el pecho, venía deseándolo todo el camino

Así estuvimos por un buen rato, hasta que me dijo

_ Luego seguimos quiero enseñarte algo, el atardecer 

_ Lo vemos desde ahí. Le dije señalando la terraza. 

_ No coge las llaves te voy a enseñar algo especial, es cerquita, cabo Touriñan, el punto más occidental de toda la península. El norte puro.

_ Vale, vale con ese entusiasmo me vendes lo que quieras

_ Allí la puesta es alucinante.

Lo cierto es que no había exagerado nada. Era precioso. Cenamos en un bar del pueblo, que ella conocía.

De vuelta en la cabaña ella misma se apartó el vestido para descubrir los pechos, mientras estaba apoyada en una columna de madera;

_ Íbamos aquí me los estabas besando, me dijo

Es insaciable y me encanta. Y ahí mismo apoyada en la columna de madera la follé salvajemente.  El principio de la noche que daría mucho de sí. 

Al despertarme faltaba de mi lado, y oí el agua, se estaba duchando, me senté en la cama con la puerta abierta, la ducha estaba enfrente. La mampara era de cristal transparente así que disfrutaba de la vista. Cómo se frotaba y se enjabonaba. Hasta que al final la veo salir, descalza. Envuelta en una toalla.

_ No me lo puedo creer nena

_ ¿Que?

_ Descalza

_ No empieces

_ ¿Como que no empiece? Mira una cosa es en casa que no me gusta, y te aviso y nada.... Pero puedo hacer la vista gorda. Ahora otra cosa ya es un bungalow de playa... Que lo mínimo es que te vayas con hongos para casa.

Ahí ya estaba toda roja mirando el suelo.

_ No dices nada?? Y mírame cuando te hablo

_ No fue a posta, la verdad no lo había pensado

_Pues ya eres grande para comportarte como una cría irresponsable.

Más roja aún, le costaba sostenerme la mirada.

_ Que hago yo cuando te comportas así?

_ Me castigas, dijo en tono casi inaudible y con la mirada de nuevo baja

_ ¿Como? Hablas con el suelo o conmigo? Repítelo alto y claro.

_ Me castigas

_ Bien y como?

_ Esto todo no es necesario

_  Eso lo decido yo que soy el que marca las reglas siempre te olvidas de ese detalle. Ahora por lista sácate la toalla. Venga como?

Totalmente sonrojada se sacó la toalla y totalmente desnuda me dijo 

_ Caléntandome el culo

_ Vale ahora me lo repites todo junto, alto y claro y bien porque me estoy cansando

Tardó un poquito pero al final se soltó

_ Que me comportó como una niña irresponsable y cuando me comporto así tú me castigas azotándome en el culo y lo sé y estaba avisada.

_ Bien, pues ya lo has dicho tú todo

_ Jo, cielo perdona es que nunca me acuerdo

_ Jajaja jajaja jajaja pues mira al final estrenaras mis chanclas, te la voy a dejar bien marcada para que no se te olvide. Me esforzare para que lo recuerdes. Tráelas y vente le dije señalando mis rodillas.

Se acercó y me las dio

_ Colócate

Cuando estaba colocada cogí la chancla y comencé a pasársela suave como acariciándole las nalgas con ella. Al poco rato empecé ya a azotarla, la hacía estallar con fuerza sobre sus nalgas que iban cogiendo color, y que no había precalentado antes. Los golpes los espaciaba algo  para que no se solaparan, pero no mucho para que aún pícara bien el anterior. Alternaba una nalga y otra. Sin dejarme ni un centímetro sin azotar.

_ Creo que hemos escogido bien la suela

Y seguí pero ella ya empezaba a tensarse y apretar el culo

_ Ese culo señorita

Nada seguía igual

_ Sabes que lo quiero suelto

_ Lo siento es sin querer

La avisé varias veces y nada así que decidí tomar medidas

_SI no aprendes por las buenas aprenderás por las malas, levántate que voy a buscar una cosa.

Y mi mente se disparó cuando lo vi ir hacia la maleta, la había revisado yo no tenía nada. 

_ En la maleta no viene ninguno de tus juguetitos

_ jajaja jajaja que no? Y saco del neceser un plug metálico con joya.

Lo único que preparó él el neceser. 

_ reina te llevo años de ventaja. Por lista te lo voy a dejar hasta la noche.

Se lo lubriqué en el coño con su propio jugo y luego despacito se lo fui poniendo.

Una vez colocado la hice colocarse de nuevo y comencé a azotarla de nuevo, por un buen rato hasta que ya la vi realmente incómoda y las nalgas como un mapa ahí paré. La mandé a la columna de madera, esa en la que la noche anterior la folle salvajemente, como ella adoraba que lo hiciera. Mientras yo me di una ducha. Al salir me vestí y le ordené que hiciera lo mismo. 

_ Así

_ Así como?

_ Sin nada?... Sin crema....? Sin caricias...?

_ Jajaja jajaja si así hay que aprovechar el día.

Mientras me vestía el metió cosas y preparó la mochila. Salimos y tomamos café en un bar cercano, en la barra, él se sentó, yo por supuesto no, estaba muy incómodo y dolorida, los azotes habían sido excesivos y luego lo que me molestaba el maldito plug.

Salimos del bar caminando entre las casas del pueblo. Para lo que yo pensaba que sería dar un paseo.  Cuando me dice

_ Vamos a la playa

_ No ni de broma

_ No es una pregunta te estoy informando, ya he cogido las cosas las llevo en la mochila 

_ Ni lo sueñes tío!!  no me pongo en biquini así tengo miles de marcas de tus suelas en mis nalgas y muslos

_ Es parte del castigo

_ Que no vete solo si quieres, es que me niego

_ O te vienes a la playa conmigo o volvemos juntos a la cabaña, y te vuelves a poner en mis rodillas y volvemos a repetir la misma dosis exacta...

Se enfadó protestó, visto su éxito lo probó cariñosa luego ya  puso cara de pena y suplicó. Pero yo no cedía. 

_ Venga tu misma

_ Déjame al menos pensarlo

_ Llevamos aquí parados un buen rato.

Al ver que nada funcionaba dijo

_ Iré a la playa!!! No quiero pero no soportaría repetir de nuevo lo de está mañana. Pero que sepas que nunca nadie en mi vida me hizo pasar tanta vergüenza.

Llegamos y había bastante gente, ella se apuro a coger sitio lo más apartado posible, le ví la intención claramente, pero lo pasé por alto, tampoco era cuestión de machacar demás. Además con el efecto de tenerla perturbada me llegaba. Y eso estaba asegurado. Se colocó boca arriba sobre la toalla con las consiguientes molestias extras encima de las que ya tenía... 

_ No piensas girarte?

_ No mientras me aguante

_ Ya hace calor nos damos un baño?

_Yo no voy 

_ Te espero? 

_ No vete si quieres yo no me muevo de la toalla hasta que nos vallamos

_ Jajaja jajaja no es para tanto, verán que te portaste mal y te calentaron como a una niña mala.

_ Cabrón.

Apretaba el calor y me pegue un baño que me sentó genial. Cuando volví seguía igual. 

_ Que tal el agua?

_ Buenísima

_ Que envidia, con la gana que tenía de venirme a la playa, me giró un ratito que no aguanto más

Yo no sé cómo aguanto tanto, ahí si despertó en mi algo similar a la compasión y me dio pena.

Cuando se giró le puse crema en las nalgas y en la espalda y le di un masajito que los adora.  Y llego la hora de irnos a comer. Fuimos al bar, estuvo poco comunicativa en toda la comida súper hermética y dolida aparte de lo físico en el carácter y el orgullo. Después de la comida dijo que quería descansar. La dejé le propuse antes hacer un paseo andando, en coche, nada no quería nada. La dejé y se acostó acurrucada en un ovillo como si hiciera el frío del mundo. Decidí darle su tiempo. Pensé que sería todo el día. Pero al final de la tarde se levantó y me buscó estaba en la terraza en la piscina, le había pasado el enfado.

_Hola

_ Hola, mejor? Has descansado?

_ No descansé pero si estoy mejor

_ Me acompañas, métete conmigo anda

_ Vale por lo menos me baño.

Y ahí se me encendió la bombilla.

_ No mejor salgo yo y bajamos a la playa

_ ¿Ahora? 

_ ¿Por que no? La tendremos para nosotros

Los ojos se le iluminaron de golpe. Y tardo décimas de segundo en contestarme

_ Siii

_ Y si te pones el vestido de ayer

Cogí solo un par de toallas, la agarré fuerte de la mano y bajamos cogidos el estrecho camino serpenteante entre las casas que baja al arenal.

Al llegar se sacó el vestido y se fue corriendo al agua desnuda sin nada, estuvimos un buen rato jugando, abrazandonos. Hasta que por fin me dijo; 

_ Salimos

Y salió y la seguí la cubrí con la toalla y la abracé

_ Oye me podías sacar el plug? Has dicho todo el día y ya es de noche. 

Pues tenía razón la mandé arrodillarse en la arena y luego ponerse a cuatro patas. Con cuidado se lo retire, pero no podía desaprovechar su culito dilatado los dos lo sabíamos. Sin apenas resistencia se la metí, comencé suave y fui acelerando el ritmo, al final eran embestidas fuertes, al tiempo que con los dedos comencé a penetrarle su sexo, más inundado de lo común, me comentó que en la playa por la mañana paso mucha vergüenza pero al mismo tiempo la situación la excitó muchísimo. Así  la folle por detrás como a ella le gustaba salvajemente, en la playa. Nos venimos al mismo tiempo....

Y aún nos quedaba un día por disfrutar...